Miscelánea de autodidacta

 

 

 

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 Tres veces he muerto en tus brazos en una bella y maravillosa agonía. Enredaderas eran tus abrazos cada instante que te hice mía. Tres veces te he soñado, criatura, temblorosa, cariñosa, entregada. Tenían tus labios tanta  dulzura que después de ti no había nada. Tres veces tu talle se hizo rosa, rosa delicadamente perfumada. Fuiste mi muñequita preciosa mientras quemamos la madrugada. Fuiste agua cristalina y hoguera. Fuiste garza y águila imperial. Fuiste mi verano y mi primavera. Fuiste miel del más dulce panal.  Si supieras cómo te he devorado, cómo amándote perdía la razón, conocerías el deseo apasionado que siente por una leona un león.  José Enrique Oti García.

 

 

 

Es un chulo a un asiento pegado. Es un cabronazo superlativo. Es un vil mentiroso compulsivo. Es un pelele por muchos usado. Es un dirigente mal encarado. Es un cínico con y sin motivo. Es un prepotente y un festivo. Es un un titiritero desfasado. Es una manejable marioneta. Es un personaje peor que malo. Es un corredor que no tiene meta. Es un patán que cree tener halo. Es burro que a coces arremete. Es un truño clavado en un palo. José Enrique Oti García.

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    Diamantes son los dientes de tu boca. Ambrosía debe haber en tus labios rosados.       De platino está hecha tu figura.         De oro tus cabellos rizados. Lava de volcán debe correr en tus venas.     Ríos de pasión entre tus brazos.  De canela deben estar hechos tus besos.      De fuego tus adorables abrazos.       Son tus andares de bailarina.   Son tus movimientos de mariposa.  Tus caricias deben ser cómo suspiros.      Son tus encantos de semidiosa. Eres mujer de mirada provocativa.    Eres mujer de caminar sereno.   Eres mujer libre y sin ataduras.  Er es mujer mi soñado veneno. José  Enrique Oti García. 

 

Si mañana ya no te sueño es porque no te podré soñar. y no podré, vida mía, porque  ya emprendí el largo sueño   del que no voy a despertar.     Si mañana ya no te adoro   es porque no te podré adorar   y no podré, vida mía, porque     ya mi barca habrá partido    rumbo a un desconocido mar.    Si mañana ya no te pido calor      es porque mi voz se apagó   cómo vela que consume el tiempo, mas recuerda, vida mía, que cómo yo,    como yo, nadie, nadie te deseó. José Enrique Oti García.

  Con un amalgama de contradicciones. Con dardos de miel envenenados. Con mil razones y mil sinrazones contestó a sus cartas de enamorado. Y soñó que besaba a su gran amor Y vagó con sus sueños en la mochila. Y se creyó el gorrión bello ruiseñor sin saber que era el último de la fila. Y un día aterrizó en la cruda realidad. Su palomita era viajera golondrina. Y se quiso morir en su terrible soledad que cada mañana lo sumía en la rutina. Mas el tiempo es fiera que muere matando. Y el tiempo mató aquel amor de fantasía. Y otro amor a su puerta cerrada fue llegando para abrazarlo cómo una preciosa poesía. José Enrique Oti García.

 

La hiedra me prendió por la cintura, De fuego fue hecho el acoplamiento. Sus manos iban perdiendo el tiento. Sus miradas eran mi firmamento. Estaba subiendo la temperatura. Veintinueve años buscaban ternura. Sesenta y seis años vivían el momento. Los besos se bañaban en contento. La alférez saludó al viejo sargento. Se avecinaba una gran aventura. Torbellino de caricias, bravura. Quedó maravillado el portento. De fruta verde era el sustento. Un grato sustento de hermosura. Ardía la tarde con la calentura. La gaviota se perdió en el viento. La garza en un grácil movimiento. De rosas fue hecha la mordedura. Serpentinas hechas con donosura lograron fundir aquel monumento en la ferocidad de la catadura. ¡Ay, Nena! Tu calor en mí perdura. ¡Que maravilloso es sentir tu aliento buscando el gozo entre la locura! José Enrique Oti García.

1.-Si vivir es una fea mentira y morir una bella verdad, vive muriendo de amor y amarás la fealdad. 2.-Vivir es cada día comenzar a luchar, morir no es más que ganar cuando se cree que muriendo se vuelve a empezar. 3.-Respira amor y vida respirarás, respira odio y muerte olerás. 4.-No vivas para trabajar, trabaja para vivir, que vivir para trabajar vive el loco y en vez de vivir se muere poco a poco. 5.-Para el pesimista un día vivido es un día menos de vida, para el optimista es un día más, para mí es un día hermoso por el que le doy gracias al Todopoderoso. José Enrique.

 1.-Si sabes de dónde vienes y quieres a buen lugar llegar mira bien dónde pisas antes de caminar. 2.-Caminar camina la gente guapa y la gente fea, distinguirás una de la otra viendo de que pie cojea. 3.-Cuando llegan los socavones es cuando al camino le hay que echar cojones. 4.- Todo camino de rosas tiene espinas en las esquinas. 5.-El camino es más llevado cuando tienes alguien que te dice: Te quiero.  José Enrique.

      En verdad que la vida te agota     cuando vives en un aciago sueño en el que crees que nunca serás dueño     más que de una penosa  derrota.   Mas aún así que hermoso es vivir    soñado con juguetona quimera que hace del invierno, primavera,    y que la sangre te hace hervir. Pequeño gorrión que sueñas despierto,     y que jamás vas a dejar de soñar    mantén siempre un ojito abierto, que lo incierto puede hacerse cierto,   ya que cuando no se sabe navegar   se pude llegar a inesperado puerto . José Enrique Oti García.

 

 

 

     ¿Quién no se perdió en una mirada? ¿Quién no disfrutó de un gran momento?    ¿Y quién  no cabalgó el frío viento    cuando su sueño se quedó en nada ?      ¿Quién no deseó ser su madrugada?   ¿Quién no fue de su cepa un sarmiento?       ¿Y quién no oyó su propio lamento            en la soledad más despiadada? Mas somos un pozo de sentimientos,     y de sentimientos almibarados  que al amor levanta monumentos.   Nacimos del amor enamorados y en el amor no hay razonamientos,  pues amamos aun sin ser amados. José Enrique Oti García.

 

 

Eran excusas la busca de setas, varas de san Juan, rosas, azafrán, o el fingido estudio del gavilán para entrar en su valle de tafetán, par entrar en su valle de violetas. Dos locos jugando a ser cometas, cometas dulces cómo el mazapán que se volvían en garza y faisán para hacer más potente el imán que atraía novedosas metas. Traviesas las escapadas secretas en las que el gorrión quiso ser alazán y se quedó en cariñoso gañán que admiraba floridas mesetas. Mas el sino los hizo marionetas colgando de hilos hechos de afán que el tiempo cómo voraz caimán devoró con ansias poco discretas. Efímero viaje  de dos corbetas porque en sus cascos hicieron grietas la maldad de paletos y paletas, Fue la castidad treta de las tretas para derrotar al amor, débil titán, y para más inri usaron caretas.  José Enrique Oti García.  

 

 

 

 

Porque eres preciosa cómo una noche estrellada. Porque eres preciosa cómo una mañana soleada. Porque eres la luz que me ilumina al amanecer. Porque eres la luz  que me ilumina al anochecer. Porque eres la brújula que me guía en la oscuridad. Porque eres la brújula que señala siempre la verdad. Porque eres tan tierna cómo un beso en la mejilla. Porque eres tan tierna cómo una adorable chiquilla. Porque eres mi vida, amante, amiga y compañera. Porque eres mi vida te amaré hasta el día que muera. José Enrique Oti García.

 

Altivo o car ballo das promesas con belos corazóns estrelados, nas súas ramas os secredos gardados lle daban sombra a dous apoucados que da inxenuidade eran presos. Xogando a príncipes e princesas; eu cos pantalón curtos remendados, ela cos cabelos enmarañados, pero eramos tan afortunados que fixemos nacer mel nas devesas. Cinsenta en campo de framboesas que entreabriu os beizos rosados para que, tremendo, foran beixados polo gorrión das lagoas e presas. Gorrión que viu nos penedos turquesas ó notar os beizos acariñados por outros beiciños efeitizados, enfeitazos por lombas travesas. Mataron ó gorrión mentes avesas, mais quedaron corazóns anoados na árbore das froitiñas acesas. E chorou a raíña das tigresas por campos que non serían arados pois os anegaron mentes avesas. Xosé Enrique Oti García.

 

 

 

 

Moi lonxe queda o caldo matinal, caldo dunha pota enferruxada que daba noxo vela ateigada, porque o unto, miseria odiada, lucía entre coles coma tendal. Soñabamos con esa chicha frescal que paparía a señoritada, mentres a panza, xa escarmentada, facendo ruidiños na madrugada pedía a berros un prato formal. Mais a fame foi pecado venial habendo froita toda a tempada. Íase perder a non afanada, debiamos aproveitar aquel caudal. Sempre me gustou o reino vexetal, e o animal que nunha redada non me atrapou na horta vaiada porque moi no fondo lle daba igual. Todo trae un recordo virxinal de cando a nenez era dourada e a aventura doce manantial. Tempos en que vivía co esencial e era ditoso con case nada, anque unha enchenta nunca viña mal. Xosé Enrique Oti García.

 

 

 

 

     ¡Qué ven o dono pola tomada!,    díxenlle ó anxino aquel verán,  e mentres nos berraba o hortelan   cunha ameixa aínda na sua  man       corría a moneca, asustada.    Na ponte da Gulpìlleira, parada.      Se sentiu un xigante o gañan       ó saborear una froita louzan.   Un primer beixo que faría gabian    a quen so era gorrión de barriada,     Tiña dozura na sua pel, tatuada,      desprendía aroma a azafrán.   facía sentir ó grumete, capitán,       na goletiña da dita soñada.     Once fíos de seda, namorada,    once fíos de aprendiz de rufián   tentando burlar a moito mexacan   que na sombra nola tiñan xurada.       Certo que era unha rapazada, mais nos tempos en que faltaba o pan       o cariño era cousa sagrada.    E a bolichas, a castañas asadas,     a membrillo, froita temperán, sabían os beixos polas vaguadas. Xosé Enrique Oti García.

 

 

 

 

 

        A voz era coma eco estelar.      Tiña o susto no seu regazo.  Os ollos se tornababan en angazo.    Os xestos eran coma o pedrazo.        O seu soriso facía tiritar. Contos de noxentas bruxas no pinar.  Diaños facendo maldades no pazo.   Defuntos buscando un novo lazo.     Sacauntos que quitaban o bazo. Morcegos que nos querían desangrar.  Luz de candeas en continuo vacilar.    Caldo fumeante no vello cazo.   Os silencios gardaban un sabrazo.      Foi estremecedor o pestanear.      O gato chegou a atemorizar.      O seu ronroneo coma abrazo.         ia apertando  espiñazo     ata que nos se podía respirar. Macabra foi a forma de disfrutar sendo cada conto grande bombazo que ó mismo diaño puido asustar.      E aínda agora podo lembrar  o medo chegando coma puntazo feito de neves que me facían suar. Xosé Enrique Oti García.

 

 

                             PERSONAJES BLAS ( 48 años, moreno, de ojos negros y estatura mediana.) MÓNICA (26 años, delgada, pelirroja, de ojos azules y estatura mediana) DOCTOR MÓRRISON (50 año, alto y negro) CURIOSO (25 años, moreno , de ojos marrones y bajo de estatura), DON JUAN (46 años, alto, de ojos verdes y complexión fuerte.) DOÑA INÉS (24 años, rubia, de ojos azules, delgada y de estatura mediana.) NAPOLEÓN (60 años, ojos marrones, bajo de estatura y gordito.) JOSEFINA (22 años. baja de estatura, y de cabello y ojos negros.) CELESTINA (49 años, morena, de ojos color avellana y de estatura mediana), NOSTRADAMUS (70 años, moreno, de ojos negros muy alto y muy serio.) TORQUEMADA (43 años de ojos marrones, alto y moreno.) JONNY (33 años, rubio, delgado, de ojos claros y estatura mediana , GARDENIO (24 años, rubio de ojos marrones, muy delgado y amanerado. ) JOB (5O años, de complexión fuerte y con mucha paciencia.) TÁCITO (65 años. moreno y poco hablador.), SALOMÓN (66 años, al