Reflexón

He sido odiado, más  por mis  pocas virtudes, que por  mis muchos defectos, y he sido amado, más  por  mis muchos defectos que por mis pocas  virtudes, pero, en ambos casos me sentí alguien, porqué siempre creí que para el ser humano, lo importante en esta vida es, no pasar desapercibido.

José  Enrique Oti García.

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