Soneto a una beldad (poesía)

       Y la beldad se hizo mujer.

  Y salió de su Olimpo de cristal.

Y la amé en medio de un vendaval.

  Y fue mía en un nuevo amanecer.


Y sus besos me hicieron verdecer.

  Y se volvió lo divino lo carnal.

  Y me dio su esencia angelical.

 Y volamos juntos hasta fallecer.


Y fue mimosa entre las mimosas.

Y su delicadeza me hizo temblar.

  Y gocé de sus caricias garbosas.



Y juntos recitamos el verbo amar.

Y unidos nos hicimos mariposas.

Y de nuevo la he vuelto a soñar.

José Enrique Oti García.

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