Capricho (poesía)

Nació un sentimiento de frustración.

Aquel marfil que quemara mis venas.
Las dulces, perfumadas lunas llenas.
El delicioso jardín de azucenas,
fueran brisa que pasara de refilón.

Subiera a un trapecio vacilón
en circo de calientes Magdalenas.
Me sentí un payaso mata penas
que cae al vacío por las buenas
al fallarle la cuerda de sujeción.

Vi a mi garza besando a un Sansón.
con Harley negra y greñas morenas,
amigo de pendencias con cadenas.
En ese momento me sentí ratón.  

Ángel del infierno. Barbas. Brabucón
que hacía silenciar las sirenas
de policías que vi como nenas.
Junto a su banda era un ciclón.


Mas de esa vida aprendió el gorrión
que la brisa prefiere las almenas
a las garras de un temible león.

Pues la garza buscaba satisfacción
y engañaba con la miel al melenas
cuando tenía la menor ocasión.

José Enrique Oti García.