El perfume de una rosa

Una de las cosas más hermosas de las que puede disfrutar un hombre
es  echarse en un lecho perfumado por la más bella de las rosas y sentir cómo bebe de sus labios, con dulzura, cómo lo envuelve con sus caricias al unirse a él, y ver como sus luceros se van entornando hasta cerrarse en el momento que llega a la gloria, para regresar de ella con una sonrisa que, dulcemente, posa en sus labios. Esto, que muchos llaman sexo, y olo llamo, una prueba de amor.

José Enrique. Oti García.




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