Madreselva (poesía)
Madreselva colorida, bella, trepadora, dulce cómo un caramelo de algodón, eres amiga, amor, amante seductora y tierna reja que ara en mi corazón. Madreselva de mi juventud divina en la que los caminos eran de tierra, el agua de los arroyos pura, cristalina, y los halcones volaban sobre la sierra. Madreselva que aún trepa hacia el cielo donde derramas toda su sensual ternura. ¡Qué maravilloso es tu dulce anhelo cuando mezclas cordura con locura! Madreselva cuyas pinturas de guerra estaban en los colores de su rubores, eras y eres la más bella de la tierra, eres la reina morena de mis amores. José Enrique Oti García.