El amor de un truhan
El amor que te da un truhan cuando llega es fresco cómo la brisa, dulce como una sonrisa, y cuando te lo quita, es cómo un huracán, arrasa con inusitado afán. Lo peor que se puede pensar, es que ese huracán vaya perdiendo fuerza en el mar, y vuelva convertido en brisa, que en esta vida, amiga, añorar el amor de un truhan contigo quiso jugar es lo mismo que dejar de soñar.
Comentarios
Publicar un comentario