Los besos

Un beso me enseñó lo que yo creí la gloria por la noche y luego me enseñó lo que yo creía el infierno por la mañana, otro beso me sacó delo que yo creía un infierno y me llevó hasta lo que yo creía la gloria. pero otro beso, dulce, tierno, hecho de suspiros, me dijo, que no había ni infierno ni gloria, que había, besos vulgares y besos que hacían historia.

José Enrique Oti García.

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